Si estás leyendo esto es porque buscas algo. Te has dado cuenta de que algo no va del todo bien. Y quieres arreglarlo. Has dado el primer paso. Es un camino muy largo y al mismo tiempo apasionante. Yo llevo toda la vida transitando como tú, y más de veinte años aprendiendo de las personas que me regalan su confianza para acompañarlos.

Las herramientas que utilizo son muy variadas, pero todas buscando una experiencia directa que posibilite un “darse cuenta” en la conciencia del cliente, que permita una apertura a percibir las cosas de manera más sabia y amorosa. La buena noticia es que todo lo que buscas está dentro de ti, accesible. La mala es que hemos olvidado cómo acceder.

Recordar es el camino que te propongo. El cuerpo – instinto. La mente-pensamientos. El espíritu-energía. Han de integrarse y trabajar juntos en esta aventura. Y así poco a poco, no habrá lugar en tí que no te atrevas a explorar. No habrá situación que no sepas afrontar. No habrá experiencia a la que no le puedas encontrar un sentido. No habrá ninguna parte de ti que no sepas capaz de amor. Y podrás reconocer a toda la existencia como parte de ti.